DE ALEX, UN PACIENTE.



No sé como decirle
lo mucho que le quiero y
todo lo que le necesito.
Le quiero porque le veo alegre,
porque con humor escucha mis palabras
y soporta mis largas confidencias.
Le quiero porque se acerca con respeto,
acepta mis silencios y mis gritos,
me anima cuando me caigo,
y me impulsa en mis sueños.
No se escandaliza de mi pecado
ni me condena por mi limitación.
Le necesito amiga
para recibir sus consejos,
para seguir el camino
para compartir mi fe,
para decir lo que siento,
para perfeccionar conductas
y cantar por la vida,
gracias a usted.

ALEX

No hay comentarios: